MOVIMIENTO DEMOCRATICO SOCIAL Y LABORAL REGION DE O’HIGGINS

Manifiesto

 

Por varias décadas los trabajadores del campo y la ciudad, los estudiantes y los ciudadanos en general han estado sometidos a un sistema económico y social que se caracteriza por la exaltación del individualismo, donde se induce al trabajador y a la ciudadanía a preocuparse exclusivamente de sus propios problemas olvidando su capacidad de solidarizar y empatizar con otros en problemas que son de carácter colectivo, minimizando y atomizando a las organizaciones.

 

Esta tendencia individualista ha ocasionado el aumento de la indiferencia en algunos sectores de la sociedad sobre las condiciones de vida de un número importante de la población, permitiendo el avance, crecimiento y asentamiento de las políticas de mercado como mecanismo de control de cada una de la variables esenciales que determinan el desarrollo de una persona, de una familia, de la comunidad de nuestra región y de nuestro País, ampliando las inequidades y aumentando la desigualdad en la distribución de la riqueza.

 

Hoy la Clase Trabajadora y sus familias se ven enfrentadas a enormes barreras que impiden su desarrollo, mala calidad de la educación recibida, sueldos que no crecen al mismo ritmo que el aumento del valor de lo que se consume, alto niveles de endeudamiento para obtener las condiciones mínimas de satisfacción, una legislación que en su esencia no protege al trabajador ni al consumidor, un aparataje estatal con pocas atribuciones para sancionar y al mismo tiempo sanciones monetarias que no representan un desincentivo frente a las enormes ganancias que obtienen las grandes conglomerados, un sistema de salud absolutamente segregado y deficitario, y un sistema previsional en manos de empresas privadas que no permite al trabajador obtener una pensión digna al momento de jubilarse.

 

La mayoría de estas condiciones fueron impuestas en un instante en que el Estado de Derecho no existía y por lo tanto la ciudadanía no fue consultado sobre de su voluntad de acogerlas, sin embargo la mayoría de los Gobiernos existentes posterior al retorno al sistema democrático no han tenido la voluntad de plantear reformas significativas y de fondo, que permitan un avance en la protección social, y en la definición del tipo de sociedad que queremos construir. Una sociedad tendiente a alcanzar un bienestar básico el este garantizado para la sociedad en su conjunto, sin embargo si consideramos que el bienestar básico de una familia sigue sustentado por los mismos factores, Trabajo, Educación, Salud y Vivienda, en este momento los elementos anexos existentes impiden que la clase trabajadora obtenga este bienestar básico ya que sus esfuerzos se diluyen en pagar altos precios por cada elemento que conforma sus primeras necesidades, transporte, alimentación, aguas potable, alcantarillado, electricidad, calefacción, remedios, etc., sin considerar un sinnúmero de necesidades ficticias, generadas por el mercado, para aumentar el endeudamiento del trabajador y mantenerlo subyugado a la condición de mano de obra barata.

 

Una vez recuperado el Estado de Derecho las esperanzas de los trabajadores y de la clase media chilena se depositan en los representantes democráticamente elegidos, los que deberían volver las cosas a su justo equilibrio, sin embargo, después de años de plantear los mismos problemas se constata que el sistema económico, con privilegios para algunos, se mantiene prácticamente intacto, esto ha llevado a un descrédito de la Clase Política, ya que elegidos una y otra vez las mismas personas, nada cambia, la frustración y desilusión de la Clase Obrera se manifiesta en el desencanto con sus lideres y representantes, haciendo cada vez más necesario el surgimiento de nuevas formas de organización.

 

Estas nuevas organizaciones deben tener una estructura democrática, sustentadas en la base gremial, más horizontal, con más voluntades, con más trabajo y menos discursos, esta nueva organización debe ser independiente de influencias partidistas, estar al servicio de los trabajadores y la organizaciones sociales, trabajar con ellos y para ellos, discutir y decidir al pleno de una asamblea y no entre cuatro paredes de espaldas a los asociados, plantearse el objetivo de sumar y crecer, no estar a disposición de candidatos de ninguna naturaleza, en definitiva ser libres de definir su propio destino.

 

CON LA UNIDAD DE TODOS SE HACE POSIBLE

 

 

Información básica

Inicio     19 de marzo de 2012

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